Como sabemos, las empresas emergentes (startups) atraviesan por desafíos en cada etapa, así como las mejores prácticas para superar estos desafíos y avanzar hacia el éxito.
Ya sea que seas un emprendedor que está comenzando su propio negocio o un inversor interesado en el mundo de las startups, este blog te brindará información valiosa y perspectivas únicas para ayudarte a navegar el emocionante mundo de las startups.
¿Porque es importante saber en qué etapa estoy?
Es importante saber en qué etapa se encuentra tu startup, ya que en base a esto es posible identificar prioridades y responsabilidades, así como también entender los siguientes pasos para entender mejor tu mercado.
Cada etapa se caracteriza por el trabajo que realiza, un mapa, que hay que seguir en base a retos diarios como founder de una startup. Es posible que las etapas puedan cambiar respecto a tu experiencia en una industria en particular o contactos estratégicos que te ayuden a encontrar insights nuevos, clientes potenciales o inversión.
Tipos de etapas
1. Pre-seed (presemilla)
Es aquí donde se produce la base en la cual se desea llevar a cabo tu empresa. Te encontrarás en el mundo de las ideas, piensas lo cual deseas dar, sin embargo todavía no existe un producto posible ni tampoco un modelo que se encuentre validado. Por esa razón, tu los equipamientos de trabajo es fundamental para alzar financiamiento. De aquí en adelante se pone en marcha tu plan. Esta fase está marcada por la construcción de una estrategia de negocios.
2. Seed (semilla)
Sin duda esta es una de las etapas más relevantes para el desarrollo de todo plan debido a que debes validar tu modelo de comercio. En algunos casos hace falta hacer una pequeña inversión para probar el producto o servicio dentro del mercado de consumidores fines. En este periodo tendrás la posibilidad de ver si en verdad tu iniciativa funciona o no.
3. Early stage (etapa temprana)
Todo dependerá de los resultados arrojados en la fase anterior. Conocerás la recepción de los clientes ante tu plan. Esto abre campo para arreglar probables fallas identificadas. Tal, ya tendrás la posibilidad de pensar en algo más tangible y, de hecho, escalable.
No puedes olvidar hacer alianzas, hallar proveedores, lograr financiamiento y reconocer el costo comparativo que caracteriza tu startup. Ya puedes pensar en toda clase de herramientas para captar potenciales consumidores, así sea mediante marketing digital, publicidad, entre otras.
4. Growth stage (crecimiento)
Cuando llegas a esta etapa tendrás claro que tu proyecto ya está validado con métricas que solidifican las bases del funcionamiento de tu producto o servicio. Siempre debes estar alerta para identificar las posibles mejoras a realizar. Esto permite crear nuevas estratégicas que se traducen, finalmente, en crecimiento. También es relevante tener liquidez. Tu flujo de caja debe ser positivo para captar clientes, contratar personal y buscar financiamiento externo.
5. Expansión
Está validado tu modelo de negocio no solo en tu región sino hace “fit” en otros.
Has crecido y tienes una cartera de clientes que respalda tu proyecto. Es hora de expandir tus horizontes y hacerte de los mercados internacionales. Siempre hay un riesgo asociado por lo que tus pies siempre deben estar sobre la tierra. Sin embargo, si tu modelo funciona podrás llegar a nuevos mercados, ampliar tus nichos y lograr mayores ganancias.
Conocer en qué etapa se encuentra tu startup es fundamental para tomar decisiones informadas y diseñar una estrategia adecuada para el crecimiento y éxito de tu empresa. Cada etapa presenta desafíos únicos y requiere un enfoque específico para superarlos y avanzar hacia la siguiente etapa.
Si tu startup se encuentra en la etapa de concepción, es importante enfocarse en la validación de tu idea de negocio y la creación de un modelo de negocio viable. Si estás en la etapa de desarrollo, el enfoque debe estar en la construcción de un producto mínimo viable y en la validación del mercado.
En la etapa de crecimiento, debes centrarte en el desarrollo de una base sólida de clientes y en la creación de una estructura organizativa que permita el crecimiento sostenible. En la etapa de consolidación, es importante enfocarse en la eficiencia operativa y en la creación de una cultura empresarial sólida.
En última instancia, conocer en qué etapa se encuentra tu startup te permitirá enfocarte en los desafíos específicos que enfrenta tu empresa y tomar decisiones informadas para avanzar hacia el éxito.
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